Los departamentos oficiales de restauración de los fabricantes de automóviles de gama alta se están convirtiendo en algo habitual. Hemos visto unos cuantos Porsche antiguos, resucitados en máquinas gloriosas con una precisión tal a la de un coche nuevo.

Antes de que la pandemia diera un golpe al mundo el año pasado, Bugatti anunció su propia división, llamada 'La Maison Pur Sang'. Traducido al castellano, significa la casa de sangre pura, pero nos quedaremos con la pronunciación francesa porque suena mucho mejor.

Galería: Bugatti Veyron Grand Sport 2008 restaurado

A modo de resumen, el programa La Maison Pur Sang de Bugatti consiste en hacer que los coches antiguos vuelvan a ser nuevos, manteniendo una atención extrema por los detalles y la conocida precisión de Bugatti durante todo el proceso.

Ahora, se ha revelado el primer Bugatti clásico en recibir los beneficios de este programa, y si somos sinceros, no es un clásico en sentido estricto. Con solo 13 años, este Bugatti Veyron de 2008 apenas supera la edad media de los coches que circulan actualmente, y no es que los Veyrons sean 'superventas' fabricados en masa. Pero, como ocurre con la mayoría de las cosas de Bugatti, hay mucho más detrás de este coche.

Bugatti Veyron Grand Sport 2008 restaurado

Este Veyron de 2008 es en realidad un 16.4 Grand Sport, pero también resultó ser el primero, y con ello nos referimos al primer prototipo. Este coche debutó originalmente en 2008 en Pebble Beach, por lo que es muy oportuno que Bugatti reintroduzca esta rara máquina justo antes del evento de Pebble Beach de 2021.

Bugatti Veyron Grand Sport 2008 restaurado

No está claro qué pasó exactamente con este Veyron durante los años pasados; Bugatti dice que recorrió el mundo tras su debut, pero una vez terminada la gira, parece que dejó de estar bajo el cuidado del fabricante, ya que fue readquirido por Bugatti el año pasado.

De vuelta a la sede del fabricante de automóviles en Molsheim, el equipo de La Maison Pur Sang inició el proceso de restauración. Para Bugatti, eso significa algo más que pintura nueva y cuero fresco. El primer paso es verificar la autenticidad del vehículo, lo que implica una confirmación no solo del número de bastidor, sino también de los sellos en varias partes del coche.

Bugatti Veyron Grand Sport 2008 restaurado

Sospechamos que estos pasos son mucho más sencillos en un coche moderno que en máquinas realmente clásicas de los años 30, pero el proceso intensivo para garantizar la precisión y la autenticidad es el mismo independientemente de la edad del vehículo.

Una vez confirmada la autenticidad del Veyron, fue desmontado y devuelto a la configuración original de su estreno, incluida la consola central original del interior. Lleva un acabado blanco plateado metalizado con un interior de cuero Cognac, y parece un vehículo completamente nuevo.

Bugatti Veyron Grand Sport 2008 restaurado

El equipo tardó cuatro meses en terminar el proyecto, aunque sospechamos que el mismo procedimiento para un Bugatti clásico llevaría mucho más tiempo. Sin embargo, sospechamos que los propietarios de Bugatti clásicos no encontrarán un servicio mejor y más especializado en ningún lugar del mundo.