Los datos que se desprenden de un informe elaborado por BP, Castrol y el RACE son preocupantes: un 18% de los conductores españoles confiesa haber accedido a sus perfiles de las redes sociales mientras conduce, una peligrosa maniobra, que un 12% de ellos lleva a cabo de manera habitual.

Sin embargo, si nos centramos en los conductores más jóvenes, con edades comprendidas entre los 18 y los 24 años, que son los más expuestos a estas nuevas tecnologías, el dato es todavía peor, ya que un 17% admite que lo hace con frecuencia. Sin duda, se trata de un auténtico problema de seguridad vial.

Ahora bien, consultar las aplicaciones de Facebook, Twitter o Instagram, por poner algunos ejemplos, no es la mala (y peligrosa) costumbre más repetida al volante. Al menos, según este estudio, que se llevó a cabo por primera vez en el año 2014.

De hecho, llama la atención que solo sea la quinta más repetida, por detrás del manejo del smartphone como dispositivo GPS, de empleo de aplicaciones de mensajería instantánea, de llevar a cabo llamadas sin emplear un dispositivo de tipo manos libres o de leer correos electrónicos.

El peligro de consultar las redes sociales en el móvil, mientras se camina, también se extiende hasta los peatones, entre los que se ha convertido en un factor clave para el aumento de los atropellos en las ciudades.

De este modo, ya sea conduciendo o caminando, más de medio millón de españoles afirman haber sufrido algún tipo de percance o incidente relacionado con el mal uso del teléfono móvil.

Fuentes: Informe BP, Castrol y RACE, vía Infovial