Siempre nos han gustado las motos de Triumph, ya que son diferentes, poseen un estilo propio y resultan divertidas de conducir. Al mismo tiempo, se trata de uno de los pocos fabricantes europeos que han sabido sobreponerse al dominio de las marcas japonesas en la industria mundial de la motocicleta; y sólo eso ya constituye un enorme éxito. Sin embargo, la reciente Bonneville Bobber ha ido más allá y nos ha robado el corazón desde el primer momento por su fuerte personalidad y arrebatadora estética. Naturalmente, la Bobber también ha causado sensación en el mercado norteamericano.

Bonneville Bobber, la Triumph más vendida en EE.UU.
Después de lograr el pasado año las mejores ventas de su historia, Triumph Motorcycles America acaba de anunciar que la Bonneville Bobber se ha convertido en el nuevo modelo más solicitado en la historia de la marca británica, recibiendo más pedidos de este modelo en su primer mes de comercialización que cualquier otro lanzamiento anterior de la firma.
Este año Triumph ha añadido cinco nuevos modelos a la familia Bonneville, los T100, T100 Black, Street Scrambler, Street Cup y Bobber, además de una nueva Street Triple. Paralelamente al éxito de la gama en general, Triumph cerraba el primer trimestre de 2017 con un aumento del 15% en sus ventas, en comparación con el mismo periodo del pasado año.

Este éxito viene después de una amplia acción de marketing de la marca, el Bonneville Bobber Brutal Beauty Tour. El itinerario de la muestra ambulante ha incluido más de 50 paradas en Estados Unidos y Canadá, dando así a sus potenciales clientes la posibilidad de conocer en primera persona cada novedad de la gama.
Triumph Bonneville Bobber, un clásico contemporáneo
“Ha sido un gran comienzo en lo que estoy seguro será otro año de récord para los concesionarios Triumph en Norteamérica”, aseguraba recientemente Matt Sheahan, responsable de Triumph Motorcycles America. “Ha sido perfecto dar a los entusiastas de la marca la posibilidad de echar un primer vistazo a nuestras motos durante la gira, y hemos comprobado que les han gustado tanto como a nosotros. Soy uno de los primeros empleados que se ha comprado una Bobber y estoy deseando volver a casa para salir con ella”, aseguraba el directivo de la firma con optimismo.