Al hablar del BMW M4 Competition Coupé 2021 de esta prueba, a buen seguro, lo hacemos de uno de los deportivos más esperados del año. Pero también, de uno de los mejores modelos que vayamos probar en todo 2021.

De primeras, puede sonar exagerado, pero la mejoría dinámica del M4 2021 es tan elevada, que ya en marzo me atrevo a incluirlo en mi selección imaginaria de los 10 mejores coches de la temporada.

Porque sí, el M4 Competition corre. De hecho, corre un poco más de lo que te puedas imaginar. Pero eso no es algo sorprendente, cuando hablas de un BMW que esconde un motor de 510 CV bajo el capó. El mayor paso adelante lo percibo en el apartado del comportamiento, donde es un coche divertido, sí, pero menos delicado de reacciones que su antecesor.

Pero empecemos por el principio. Actualmente, nos encontramos ante la sexta generación de la saga M3 (segunda del M4, tras la 'independencia' de finales de 2013), por lo que hablamos de un modelo con gran historia tras de sí, con algunos modelos que han enamorado más que otros.

Sin embargo, el modelo actual juega duro... en todos los sentidos. Porque a los actuales M3 y M4 Coupé, se unirán el esperado M4 Cabrio (este mismo año) y el primer M3 Touring de la historia (en 2022 o 2023).

Además de esa variedad de versiones, esta nueva entrega de la saga ofrece otro aspecto muy valorado por los amantes de los deportivos: en sus versiones Competition, las únicas que llegan a España, tanto el M3 como el M4 Coupé superan la barrera de los 500 CV de potencia.

De hecho, el propulsor de 3,0 litros y seis cilindros en línea, con dos turbos, se 'descuelga' con nada menos que 510 CV a 6.250 rpm y un espectacular par motor máximo de 650 Nm, repartido entre 2.750 y 5.500 vueltas.

Y apenas basta una primera aceleración a fondo, para descubrir de lo que es capaz el modelo. Y no solo hablo de prestaciones, un aspecto en el que cumple de sobra, con 3,9 segundos en el 0 a 100 km/h (12,5 segundos, en el 0 a 200) y una velocidad máxima de hasta 290 km/h.

BMW M4 2021

Más bien, de cómo acelera. Algo que hace con una profesionalidad y una decisión que llegan a asustar. Desde luego, para el M4 Competition, acelerar hasta un poco más allá de las 7.000 vueltas, sin desfallecer, es algo así como un día más en la oficina.

De hecho, basta con subir un par de marchas para que, casi sin darte cuenta, estés rodando a velocidades con las que podrías enfrentarte a una sanción mucho más que seria.

Pero también, esto te sirve para descubrir otras de las fortalezas del nuevo BMW M4, como son el buen trabajo que lleva a cabo la transmisión automática con convertidor de par y ocho relaciones M Steptronic, con función Drivelogic, y lo bien que tracciona el coche, a pesar de ser un propulsión trasera.

BMW M4 2021

De hecho, durante la ruta, tuve dudas de si lo hacía mejor en curvas rápidas o lentas, llegando a la conclusión de que iba disfrutando al volante por igual. Y encima, en ciudad o por autovía, no es un coche especialmente incómodo.

Eso sí, con un consumo homologado de 10,0 litros cada 100 kilómetros, la cifra que reflejará el ordenador de a bordo podrá subir tanto como el conductor quiera...

BMW M4 2021

En general, las buenas sensaciones se mantienen en cualquier tipo de tramo virado, donde, personalmente, encuentro una diferencia enorme frente al modelo precedente. Porque ahora, no vas tan en el alambre con él, no es tan exigente o, si me permites la expresión, tan radical de reacciones.

Porque no nos engañemos, si pretendes llevarlo al límite, el M4 Coupé sigue siendo tremendamente exigente, pero te hace sufrir menos. Digamos que, si te concentras en lo que estás haciendo y le coges el punto, puedes ir extremadamente rápido... sin sustos de por medio.

Parte de la confianza del conductor reside en la dirección, con una precisión casi quirúrgica. Pero también, en el equipo de frenos (los carbocerámicos, indestructibles), la amortiguación y la caja de cambios, que actúa con una gran velocidad (cuenta con tres modos), pudiéndose gestionar en modo manual-secuencial mediante levas.

BMW M4 2021

Obviamente, todo esto se consigue con una puesta a punto específica del chasis, con refuerzos estructurales, una suspensión adaptativa, una dirección con desmultiplicación variable, unos neumáticos propios (con una pulgada más siempre en la llanta trasera), un diferencial activo en el eje trasero...

Y también, con la máxima personalización de todos los parámetros del coche, casi como si fuera un modelo de competición. De hecho, el control de estabilidad DSC cuenta con el denominado M Dynamic Mode, mientras que el control de tracción ASR dispone de 10 posiciones distintas.

Del mismo modo, las asistencias a la conducción pueden gestionarse mediante tres programas (Road, Sport y Track) y mediante el botón Setup es posible modificar parámetros como la respuesta del motor, la velocidad del cambio, la dureza de la suspensión, la actuación de los frenos... Todo, repartido entre las modalidades Efficient, Sport y Sport Plus.

¿Algo más? Pues sí, ya que se ofrece el M Lap Timer, una función que analiza las vueltas en circuito y el M Drift Analyser, que mide las capacidades de derrapaje del conductor.

¿Demasiado lío con las configuraciones? No hay de qué preocuparse, ya que con los botones M1 y M2, situados en el volante multifunción, podemos memorizar nuestra puesta a punto favorita.

Ah, se me olvidaba, el escape deportivo también se puede gestionar, mediante un pulsador situado en la consola central. Aunque en este sentido, puede que la melodía emitida sea ligeramente menos escandalosa que en el modelo anterior.

BMW M4 2021

Precisamente, comparado con el modelo anterior, el BMW M4 2021 es más ancho, más largo e igual de alto que el modelo precedente, al tiempo que recurre a llantas de 19 pulgadas delante y detrás (19 y 20, respectivamente, de manera opcional).

Tras ellas, se esconde un equipo de frenos M Compound, compuesto por discos de 380 milímetros (y pinzas de seis pistones) delante y de 370 milímetros detrás. Llama la atención que las pinzas puedan estar pintadas en tres colores y, opcionalmente, están disponibles los M Carbon, con pinzas doradas y dos modos de funcionamiento del pedal: Comfort y Sport.

Siguiendo con las curiosidades, el BMW M4 Competition puede incluir unos nuevos asientos de tipo baquet, los M Carbon Bucket, que además de ofrecer una sujeción superlativa del cuerpo, cuentan con ajuste eléctrico, reducen en 10 kilos el peso del vehículo y cuentan con un reposacabezas desmontable (para su uso en circuito).

BMW M4 2021

Estos asientos pueden equiparse de forma individual o dentro del paquete M Race Track, junto a las llantas de mayor tamaño, la deslimitación hasta los 290 km/h o el equipo carbocerámico de frenos, entre otras cosas. En ese supuesto, se reduce el peso del coche en unos 25 kilos, pero hay que pagar un precio ligeramente superior a los 26.000 euros.

Siguiendo con el tema monetario, el precio a pagar por el BMW M4 Competition Coupé es de 113.200 euros, exactamente 2.000 euros más que por su hermano berlina. Y para los que quieran optar por el modelo con tracción total, solo nos queda pedirles un poco de paciencia, ya que las versiones con el sistema M xDrive están a la vuelta de la esquina.

BMW M4 Competition Coupé

Motor Gasolina, 6 cilindros en línea, biturbo, 2.993 cm³
Potencia 510 CV a 6.250 rpm
Par máximo 650 Nm entre 2.750 y 5.500 rpm
Caja de cambios Automática con convertidor de par M Steptronic, 8 velocidades
0-100 km/h 3,9 s
Velocidad máxima 250 km/h (autolimitada) / 290 km/h (Paq. M Race Track)
Consumo 10,0 l/100 km
Tracción Integral M xDrive
Longitud 4,79 m
Anchura 1,89 m
Altura 1,39 m
Peso en vacío 1.725 kg
Número de asientos 4
Capacidad del maletero 440 l
Precio base 113.200 euros