La Petronas FP1 es una motocicleta de carreras extremadamente rara, con una historia llena de idas y venidas. No obstante, si has caído rendido a sus pies, ahora tienes la oportunidad de adquirir un ejemplar de 2003, sin ningún kilómetro recorrido, que está actualmente a la venta.
Para aquellos que no estén familiarizados con la triste historia de la Petronas FP1, todo sucedió tal que así. El gigante petrolero malayo Petronas decidió que quería participar en el campeonato de MotoGP. Si sigues la Fórmula 1, lo más probable es que ya estés familiarizado con el color verde 'Panache Green' de Petronas. En su momento, decidió utilizar ese esquema cromático en algunas de estas motos, incluyendo la que está actualmente en venta.
Galería: Petronas FP1 2003
De todos modos, en algún momento del proceso, se cuenta que Petronas cambió de opinión y dijo "no, entraremos en el WSBK". Eso pudo o no haber tenido algo que ver con el hecho de que también se asoció con el cuatro veces campeón de WSBK, Carl Fogarty. Ambas competiciones tienen reglamentos técnicos muy diferentes, por lo que Petronas también tuvo que reducir repentinamente la cilindrada a 899 cm3 para poder competir.
La esbelta moto tricilíndrica ofrecía 127 CV de potencia, y si las reglas del WSBK se hubieran mantenido como Petronas esperaba, la moto podría haber tenido una oportunidad de participar. Desgraciadamente, el WSBK decidió cambiar sus reglas después de que Petronas hubiera fabricado y homologado las 150 motos necesarias para competir en la serie.

Los responsables técnicos de WSBK revisaron los requisitos de cilindrada del motor incrementándola, haciendo legales las máquinas de hasta 1.000 cm3, que, irónicamente, era lo que Petronas habría fabricado si hubiera seguido las especificaciones originales de MotoGP.
Aprovechando este nuevo aumento de cilindrada, los demás equipos superaron al instante a la Petronas FP1. Es cierto que los conjuntos pequeños no suelen llegar y vencer en la primera carrera, pero este caso extremo de mala sincronización significó que el equipo literalmente no tenía ninguna opción de victoria en el futuro.
¿Recuerdas ese número mágico de homologación de 150 motos que Petronas tenía que producir para poder competir? Pues bien, la mitad de ellas se construyeron en el país de origen de Petronas, Malasia, y la otra mitad en Reino Unido, para que el equipo pudiera seguir compitiendo en 2003.
De todas las motos construidas, 50 se reservaron para la competición, con la intención de vender el resto al público debidamente homologadas. Sin embargo, ninguna de ellas llegó a ver la luz hasta 2005, y fue exclusivamente a través de un único concesionario en Malasia. Más tarde, se desarrolló una batalla fiscal y legal a nivel internacional a consecuencia de estas motos, pero esa es otra historia para otro momento.

Avanzando hasta 2018, una empresa británica llamada 'Lanzante Limited' se hizo con una partida de varias FP1 que se encontró tranquilamente en un discreto búnker británico.
Esa empresa es más conocida por restaurar coches de carreras clásicos, pero como dijo una vez el gran Winston Zeddemore, "cuando alguien te pregunta si eres un dios, dices que sí". Así pues, la empresa seguramente se pellizcó para asegurarse de que no estaba soñando, y luego comenzó inmediatamente a preparar estas motos extremadamente raras para venderlas al público entendido.
No está claro si una de esas motos de Lanzante es la que la empresa de subastas Iconic Motorbike Auctions tiene a la venta, actualmente, en su sede de Santa Mónica, California. Por la extrema rareza de estas motos, parece bastante probable y estamos seguros de que quien gane la subasta se interesará por la procedencia de esta moto tan exclusiva.
El vídeo que te enseñamos muestra tanto un paseo como un arranque en frío, para que todos podamos escuchar el rugido de la FP1. Dado que no se ha puesto en marcha en casi 20 años, su futuro dueño debería hacerle una profunda revisión antes de dar una vuelta. Por cierto, en el momento de escribir estas líneas, el precio de venta está en 58.850 dólares (unos 49.500 euros al cambio actual). Nada mal...
Fuente: RideApart.com