Tras las buenas sensaciones que siempre nos han ofrecido dos modelos como los i30 N e i30 N Fastback, hace relativamente poco, Hyundai se decidió a ampliar su gama deportiva N... por arriba y por abajo. Una 'jugada' que llevó a cabo con un utilitario, como el i20 N, y con un SUV, como el KONA N.
Pues bien, ahora, hemos podido probar la gama N de Hyundai al completo en circuito. Y cuando decimos al completo, incluimos también en la ecuación al i30, tras recibir un importante restyling, con un diseño renovado y una fuerte renovación mecánica.
¿El escenario? El siempre exigente circuito del Jarama, en Madrid, donde hemos podido extraer el máximo de estos modelos de altos vueltos. Por un lado, en el caso de los i30 N y del KONA N, con 280 CV de potencia. Por el otro, si hablamos del i20 N, con 204 CV.
Galería: Hyundai i20 N 2021
Hyundai i20 N, el más divertido
Tras la correspondiente charla técnica y el briefing sobre el circuito, es el momento de saltar a la pista. Y qué mejor que hacerlo al volante del 'benjamín' de la familia, el Hyundai i20 N. En este caso, hablamos de un llamativo utilitario, con un precio que arranca en los 29.990 euros.
En esencia, hablamos de un GTI 'de bolsillo', uno de esos que ya prácticamente no quedan y que llega para competir contra el Ford Fiesta ST. Para ello, recurre a un propulsor turbo de gasolina, con 1,6 litros y cuatro cilindros, que entrega 204 CV y 275 Nm de par máximo. Respecto al cambio, siempre es manual, de seis relaciones, mientras que la tracción recae en el eje delantero.
Por fuera, luce los clásicos ingredientes de todo modelo N de Hyundai: la pintura Azul Performance específica, una nueva parrilla, mayores entradas de aire, llantas de 18 pulgadas, pinzas de freno rojas con el logo 'N', neumáticos específicos Pirelli P Zero (con marcaje HN), alerón, difusor trasero, sistema de escape deportivo...
Con una velocidad máxima de 230 km/h y una aceleración de 0 a 100 en 6,2 segundos, el mayor punto fuerte del i20 N no está en el rendimiento del motor (que es notable, por supuesto), sino en la puesta a punto del chasis, ya que es un coche que consigue transmitir muchas sensaciones.
De hecho, en pleno circuito, da a entender que su hábitat es mucho más una carretera de montaña. Y lo hace por su precisión, su agilidad a la hora de cambiar de dirección y por su facilidad para enfrentarse a curvas lentas. Todo, acompañado por una muy buena capacidad de tracción y una zaga 'juguetona', que se mueve con facilidad y ayuda a colocar el coche a la entrada de las curvas.
También merecen ser mencionados la dirección, que resulta muy precisa, así como la caja de cambios, que también ofrece una función, conocida como REV Maching, que lleva a cabo la función de punta-tacón de manera automática.
Galería: Hyundai KONA N 2021
Hyundai KONA N, el sorprendente
El KONA N supone la llegada de la marca al segmento de los SUV deportivos de las marcas generalistas, una categoría al alza, en la que encontramos algunos rivales de peso, como pueden ser el CUPRA Ateca o el Volkswagen T-Roc R.
Desde el punto de vista estético, la receta formulada por Hyundai es similar a la del i20 N, aunque con algunas mejoras, como pueden ser la introducción de un alerón trasero de doble ala o la adopción de un segundo color exclusivo en la gama (el conocido como Sonic Blue).
También hay cambios en la parte mecánica, ya que aquí se recurre a un propulsor turbo de gasolina, con 2,0 litros y cuatro cilindros en línea, que entrega 280 CV de potencia y 392 Nm de par máximo. En efecto, hablamos del mismo propulsor con cambios profundos que equipa el i30 N Performance, siempre asociado a la transmisión automática de doble embrague DCT, de ocho marchas y con levas en el volante.
Obviamente, este SUV deportivo ofrece unas prestaciones de primer orden, que le permiten acelerar de 0 a 100 km/h en 5,5 segundos (gracias al empleo del control de arrancada Launch Control) y alcanzar una velocidad máxima de 240 km/h.
En este caso, hablamos de un modelo muy eficaz, en parte, por incluir un diferencial autoblocante mecánico, con control electrónico, lo que hace que su capacidad de tracción a la salida de las curvas sea muy elevada. Pero también, por la suspensión adaptativa (que igualmente equipa el i30 N).
Pero más que por cómo corre o cómo frena (cuenta con frenos más grandes y potentes), lo que más sorprende de este modelo es en su gran sensación de aplomo, tanto en curva rápida como lenta, con únicamente un poco más de sensación de deriva a la salida de los virajes de lo que asegura el i30 N. De este modo, resulta incluso un poco más divertido que el compacto.
Por último, destacaremos el botón NGS del volante, que al pulsarlo ofrece el máximo rendimiento del coche durante 20 segundos (puede volver a usarse pasados 40 segundos) y los modos de conducción que se ofrecen: Normal, Eco y Sport, como en el resto de la gama, así como el deportivo N y el personalizado Custom. Además, incluye un ESC con tres posiciones y cuatro modos de tracción, para potenciar su faceta SUV: Hielo, Nieve profunda, Barro y Arena.
El precio del KONA N es de 44.900 euros.
Galería: Hyundai i30 N 2021
Hyundai i30 N, el efectivo
Por último, toca cerrar el repaso a la gama con el i30 N, el modelo que más posibilidades ofrece, ya que está disponible en versiones de 250 y 280 CV (Performance), con carrocería de cinco puertas o Fastback y con cambio manual o el mencionado automático de doble embrague y ocho relaciones.
En nuestro caso, hemos optado por una variante Performance, con carrocería Fastback y cambio automático, una combinación que tiene un precio de 43.500 euros, aunque el precio de partida de la gama es de 33.900 euros.
En esencia, el i30 N sigue pareciendo tan bueno como siempre, a la hora de cumplir con su papel de compacto deportivo al uso, aunque es cierto que, a pesar de que sobre el papel el motor solo haya ganado 5 CV, sí que se aprecia una mejoría mucho más grande en términos generales.
Además de un motor muy 'lleno', el i30 N sigue siendo un coche muy preciso, que transmite una gran sensación de aplomo y que vira plano. Y todo esto, en gran medida, se debe a una suspensión adaptativa bastante firme, que contiene al máximo todos los movimientos de la carrocería.
Por su parte, el cambio automático trabaja con rapidez y precisión, aunque es posible que, en un coche como este, se le saque más partido a una caja de cambios manual; sobre todo, si se quiere disfrutar de la conducción.
En el caso de esta variante, tiene una velocidad máxima de 250 km/h (autolimitada) y acelera de 0 a 100 en 5,4 segundos. Si quieres saber más sobre el modelo, antes del restyling probamos las variantes de cinco puertas y la denominada Fastback:
El Hyundai i30 N, a prueba
