El Mercedes-Benz Clase G 2018 ha sido el último modelo en sumarse a la moda de los teasers, como demuestra este vídeo, en el que la firma alemana reconfirma que la nueva generación llegará pronto. En concreto, durante el próximo salón del automóvil de Detroit, que abrirá sus puertas entre el 13 y el 18 de enero de 2018.

Y como ya te hemos informado en otras ocasiones, la nueva generación de este TT contará con un interior completamente nuevo, una mayor calidad de acabado y un nivel tecnológico superior.

Por ahora, parece que Mercedes-Benz no está dispuesta a mostrar el diseño exterior, pero como has podido ver en innumerables fotos espía, parece que el futuro Clase G W464 conservará las formas cuadradas de su antecesor, nacido en 1979. Desde entonces, ha conseguido resistir el paso del tiempo y vender más de 300.000 unidades... Pero ahora, casi cuarenta años después, le ha llegado el momento de renovarse, al menos, en el apartado mecánico.

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Mercedes Clase G 2018: cambia todo, salvo el diseño

Por ahora, no se ha filtrado ninguna información oficial sobre las motorizaciones, aunque se espera que hagan acto de presencia las versiones G 400 d, dotada de un propulsor turbodiésel de seis cilindros en línea, 2,9 litros y 340 CV de potencia; así como un Mercedes-AMG G 63 4MATIC, impulsado por un motor 4.0 V8 biturbo de 612 CV. En cualquier caso, parece que la versión que podría desaparecer es el G 65, puesto que la compañía alemana ha sugerido que, en el futuro, los motores V12 únicamente tendrán cabida en los modelos Mercedes-Maybach

Por lo demás, se espera que el Mercedes-Benz Clase G 2018 mejore, notablemente, su dinámica de conducción en carretera, gracias a la incorporación de nuevos esquemas de suspensión, así como un sistema de amortiguación adaptativa. Por otro lado, también se sustituirá el veterano sistema de dirección, mediante recirculación de bolas, por una dirección de cremallera, que ofrecerá un tacto más preciso y un menor radio de giro. 

Una reducción de peso considerable también está en la agenda, algo que ayudaría a mejorar, todavía más, las ya legendarias capacidades del Mercedes-Benz Clase G fuera del asfalto... Todo ello, envuelto en el diseño cuadrado que es seña de identidad en este TT.