Presentado inicialmente como prototipo allá por el año 2017, el Aston Martin Valkyrie ha tenido un larguísimo periodo de gestación, debido entre otras cosas a la complejidad del propio proyecto, de forma similar al Mercedes-AMG ONE, que también se está haciendo de rogar.
La buena noticia es que, cuatro años después de conocerlo, Aston Martin acaba de arrancar la producción de su hiperdeportivo híbrido, un misil con ruedas que representa lo más de lo más dentro de la gama del fabricante y, desde luego, de la historia de la compañía.
La firma acaba de concluir la fabricación, totalmente a mano, de la primera de las 150 unidades previstas de su bestia híbrida, y según la propia marca, cada uno de estos coches lleva unas 2.000 horas de trabajo artesanal a los ingenieros de Gaydon.
Galería: El primer Aston Martin Valkyrie fabricado
Así pues, estamos ante un momento histórico para Aston Martin, que se estrena en el selecto club de los hipercoches más veloces y extremos del mundo, en este caso inspirado por la tecnología de la Fórmula 1 pero homologado para un uso en carretera, a pesar de que el circuito sea su hábitat natural.
El trazado de Silverstone, escenario del desarrollo del modelo, servirá también como pista de pruebas para todas las unidades del Aston Martin Valkyrie, que rodarán en el trazado británico antes de ser entregados a sus afortunados propietarios.
Cabe recordar que el Valkyrie combina un genial motor 6,5 litros V12 atmosférico, desarrollado por Cosworth, con un propulsor eléctrico, para sumar una potencia total de 1.177 CV y un par motor máximo de 900 Nm, nada menos.
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Gracias a estas cifras, anuncia un 0 a 100 km/h en apenas 2,5 segundos. Aquellos que no tengan suficiente, podrán optar por el Valkyrie AMR Pro, una variante exclusivamente de circuito que prescinde del motor eléctrico y consigue que el V12 alcance los 1.000 CV, pero goza de una aerodinámica más avanzada, que puede generar el doble de carga que el de calle.
"El programa Aston Martin Valkyrie ha supuesto un reto para todos los implicados, pero el compromiso con este sueño ha producido un coche realmente increíble, un coche de F1 para la carretera", ha afirmado el propio CEO de la compañía, Tobias Moers.
