No te culparíamos si pensaras que la siguiente noticia es un 'clickbait' (cibercebo o ciberanzuelo), pero lo que vas a leer y a ver es absolutamente cierto. Un agente de policía en bicicleta del aeropuerto de Orlando persiguió a una mujer ebria subida sobre una maleta motorizada a través de la terminal.
Y no, no ha sido un montaje ni un 'spoiler' de un episodio de Top Gear. Este es, sin duda, el vídeo de persecución policial más extraño que hemos visto en mucho tiempo. Tanto por el escenario, como por los vehículos elegidos.
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Los hechos sucedieron de la manera siguiente. Según WKMG News 6, este incidente ocurrió realmente el pasado mes de abril. Una mujer identificada como Chelsea Alston estaba viajando de Orlando a Nueva York en la compañía Southwest Airlines y supuestamente se le negó la entrada a su vuelo por un agente de la puerta que la consideró demasiado 'bebida'.
Al parecer, la mujer no estaba contenta con esa decisión, momento en el que un agente de policía de Orlando, Andrew Mamone, apareció en su bicicleta eléctrica para ayudarla. Ahí comienzan las imágenes de la cámara corporal del agente, que puedes ver en el vídeo adjunto.
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Y ahí es también donde comienza esta extrañísima y por momentos delirante persecución. Alston maldice mientras se aleja de la puerta de embarque sobre una maleta motorizada, e incluso el agente comenta que la maleta es bastante rápida.
"Vamos a tener una moto persiguiendo una maleta dentro de un minuto", se le escucha decir en el vídeo al agente de la autoridad. "Va a ser una locura", añade, ante el asombro del resto de viajeros que asisten a la escena.
Mamone alcanza a Alston en un tranvía de conexión entre terminales y la escolta antes de que el tranvía se ponga en movimiento. A continuación, pasa unos minutos tratando de llevarla de vuelta al control de seguridad, ya que ella ya no tiene una tarjeta de embarque válida.
Incluso se ofrece a llevarla de vuelta a la terminal general para que se le pase la borrachera, pero finalmente es detenida tras parecer que escupe al agente, lo que se considera un delito.
El vídeo termina con Alston siendo sacada del aeropuerto y metida en un coche de policía que la esperaba. Sin embargo, WKMG News 6 informa que ella dañó aún más el coche de policía una vez dentro, rompiendo el techo y haciendo sus necesidades en el asiento trasero. Si es declarada culpable, podría enfrentarse a 10 años de prisión.
Fuente: ClickOrlando.com, vía The Drive