En términos generales, podemos intuir cómo serán nuestros desplazamientos diarios en coche, dentro de unas décadas. No obstante, el prototipo Renault EZ-GO nos aclara aún más las cosas... y parecen poco propicias para los amantes de la conducción.
En esencia, el concept car francés es un modelo eléctrico y autónomo, que abandera la movilidad compartida. Dicho así, podríamos considerarlo como el taxi o el coche compartido del futuro.
Por derecho propio, el EZ-GO se convierte en el sucesor del Symbioz. Destinado a compañías públicas y privadas, los ciudadanos podrán solicitarlo a través de una app en el smartphone o esperando en estaciones permanentes.
Renault EZ-GO, disfrutando del trayecto
Estéticamente, el diseño se ha adaptado totalmente a la función práctica del vehículo. Así se entiende la adopción de un gigantesco portón trasero, cuyo ángulo de apertura permite entrar y salir a adultos sin tener que agacharse. También, el techo panorámico ofrece una amplia visión del entorno a los ocupantes, que pueden relajarse con las vistas o realizando otro tipo de actividades: lectura, chats, redes sociales...
El Renault EZ-GO dispone del nivel 4 de conducción autónoma. Básicamente, significa que puede gestionar la distancia con el vehículo que le precede, cambiar de carril y cambiar de sentido en cruces. Además, en caso de accidente, el vehículo puede moverse a un lugar seguro por sí solo o de forma remota, gracias a un centro específico de control.
Limitado a 50 km/h
Según Renault, el ejercicio de estilo se convertirá en un "símbolo emblemático para las ciudades y estará integrado en el entorno urbano. Además, ofrecerá una visión urbana de 360 grados y un espacio agradable, para que la gente se relaje y disfrute del trayecto". De hecho, el coche solo es capaz de alcanzar 50 km/h, la velocidad máxima en ciudad, e incluye una práctica plataforma de acceso.
Desde luego, con este tipo de vehículos, las ciudades se beneficiarán de un tráfico más ordenado y ecológico, aunque los amantes de la conducción lo tendremos más difícil para disfrutar al volante. Luces y sombras...
