Se abre un nuevo capítulo para Skoda. La marca checa cambia de logotipo, estrena identidad visual y muestra la dirección que tomarán sus nuevos modelos que llegarán en los próximos años.
¿Cómo lo hace? Con el nuevo Skoda Vision 7S, un prototipo de SUV eléctrico de siete plazas que debutará en 2026, junto con otras dos grandes novedades, un utilitario deportivo y una berlina compacta, ambos también eléctricos.
Además, la inversión anunciada en el proceso es enorme: 5.600 millones de euros para la movilidad eléctrica y 700 millones para la digitalización en los próximos cinco años.
La presentación del nuevo logotipo, más minimalista y digital, y el Vision 7S son, por tanto, una declaración de intenciones de Skoda para los próximos años: reforzar su identidad y distinguirse aún más de otras marcas del Grupo Volkswagen.
Vision 7S: adelanto del nuevo buque insignia, en forma de SUV
El SUV de siete plazas, que debutará en 2026 y se situará en la parte alta de la gama de Skoda, estará estrechamente relacionado con el Vision 7S, un modelo que ha tenido su estreno internacional en Praga.
Basado en la plataforma MEB, la misma del Enyaq, promete hasta 600 km de autonomía gracias a su paquete de baterías de 89 kWh de capacidad, mientras que el pico de recarga alcanza los 200 kW.
Este nuevo concept, al que podríamos catalogar como el 'hermano' eléctrico del Kodiaq, introduce un lenguaje de diseño completamente nuevo para el fabricante checo, solo parcialmente derivado del actual.
Una de las principales características es, sin duda, el nuevo frontal, que ha sido bautizado como 'Tech-Deck Face', con una reinterpretación de la clásica parrilla de Skoda que ahora oculta los distintos sensores delanteros tras un cristal oscuro.
Mínimos y aerodinámicos son los grupos ópticos delanteros que, combinando un componente vertical con otro horizontal, parecen formar una agresiva 'T'. El logotipo frontal desaparece: ahora el nombre de la marca está escrito en su totalidad.
Las siete tomas de aire delanteras son reales, al igual que las rejillas de ventilación de la parte trasera. Y en ambos casos, el elemento central de color naranja puede extraerse para que sirva de gancho de remolque.
El perfil se ve acentuado por las superficies limpias, el techo inclinado y las llantas de 22 pulgadas con diseño aerodinámico carenado, pero también por los tiradores retráctiles de las puertas y las cámaras laterales que actúan como espejos retrovisores. Dato interesante: los parachoques y los perfiles de los pasos de rueda están fabricados con neumáticos usados (y reciclados).
Entre los pasos de rueda y por encima de los faldones laterales hay más entradas de ventilación, que sirven para dejar salir el aire caliente generado por la refrigeración de la batería. La cosa no acaba ahí: también funcionan como reposapiés para las puertas, que en el caso de las traseras, se abren en sentido contrario al habitual.
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Interior que se transforma en salón
Lo que más llama la atención (y asombra) del Vision 7S es el interior, que ha sido completamente reimaginado respecto a lo que estamos acostumbrados, al tiempo que se ha diseñado para ser cómodo y versátil.
Todo ello, con gran atención a la sostenibilidad: no hay pieles de origen animal y gran parte de la tapicería se obtiene reciclando distintos materiales. Por ejemplo, el suelo del coche también se fabrica procesando neumáticos reciclados, al igual que las alfombrillas. Los tejidos que recubren las distintas partes del habitáculo, por su parte, están hechos totalmente de poliéster reciclado.
Además de buscar la proverbial amplitud y versatilidad en el diseño del habitáculo, Skoda ha optado por una original configuración con seis asientos simétricos, divididos en tres filas, y la colocación del asiento infantil en el centro del habitáculo.
Este es el asiento más seguro y mejor protegido ante los impactos, y se controla fácilmente por quienes se sientan en la segunda fila, así como por una cámara que muestra imágenes en la pantalla central.
Por otra parte, en función de los dos modos disponibles, Driving y Relaxing, el puesto de conducción del Vision 7S cambia por completo. En el primer caso, todo se centra en la conducción, con la pantalla central de 14,6 pulgadas orientada verticalmente.
Por otro lado, durante las fases de recarga o al aparcar, se puede seleccionar el modo Relax, mediante el cual el volante y el panel de instrumentos de 8,8 pulgadas se deslizan hacia atrás para liberar más espacio, mientras que los asientos de la primera fila giran hacia dentro y se reclinan, lo que permite a los pasajeros traseros una mejor visión de la pantalla central, que, al mismo tiempo, se coloca en horizontal para que puedan ver mejor el contenido de entretenimiento.
Incluso los asientos de la segunda fila se pueden reclinar. Además, al estar más lejos de la pantalla táctil, el sistema de infoentretenimiento también se puede controlar a distancia con el smartphone.
Hablando de teléfonos, pueden colocarse en la consola central o detrás de los asientos, mediante imanes. Por último, en los paneles de las puertas se han integrado superficies interactivas con luces de colores que brillan a través del tapizado.
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