El Dodge Charger es uno de los 'muscle cars' más cinematográficos de todos los tiempos. No solo por la saga 'Fast & Furious', el deportivo americano también fue el protagonista de las siete temporadas de 'Los Duques de Hazzard', la serie de televisión emitida en nuestro país de 1981 a 1986. Ahora, una unidad del legendario 'General Lee' va a ser subastada a través de la web World Wide Auctioneers.
En su momento, la serie de televisión fue una de las más populares, tanto que los productores de los estudios Warner Brothers lanzaron una intensa campaña publicitaria durante años. El estudio llegó a encargar la producción de 12 Dodge Charger de 1969, con la estética del 'General Lee', para exhibirlos en varios eventos especiales.
Galería: Dodge Charger 'General Lee' a la venta
Aunque nunca aparecieron en la pantalla, los Dodge son un verdadero 'producto oficial' y, por tanto, tienen un valor incalculable para los fans de la serie, además de para los amantes de los deportivos clásicos americanos.
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Para aumentar la exclusividad, el coche en venta está firmado por todo el reparto de 'Los Duques de Hazzard' y tiene las mismas especificaciones que el modelo estrella de la serie, aunque mejor conservado, al no tener que pasar por los aprietos a los que le sometían los protagonistas de la serie.
El aspecto del Dodge es idéntico al modelo de la serie de televisión. Pintura naranja brillante, bandera confederada en el techo, pegatina '01' en el lateral y cuernos de toro instalados en el paragolpes. No falta nada y todo está en perfecto estado.
Bajo el capó se encuentra el potente V8 de 6,3 litros con carburadores de cuatro cuerpos, que desarrolla 329 CV de potencia. El coche ha recorrido menos de 25.000 kilómetros y ha sido expuesto en un museo y utilizado para algunos eventos especiales durante los últimos 20 años.
La impresión es que el Charger encontrará fácilmente un nuevo comprador y se convertirá en una de las preciadas piezas de su colección, sobre todo, si aprecia aquellos modelos con pasado cinematográfico.
¿El precio? Es difícil de imaginar. Un Charger de época puede superar los 100.000 euros, pero dada la exclusividad de este ejemplar es probable que se vaya a cifras mucho más altas.
Fuente: World Wide Auctioneers