Los relatos de vehículos singulares abundan por todo el mundo. Increíbles hallazgos en los lugares más remotos, como sucede con el Porsche 718 RS 61 Spyder. Este modelo participó en diversas ocasiones en el Gran Premio de Sudáfrica, llegando a vencer en 1960, cuando no era puntuable para el Campeonato del Mundo de Fórmula 1, con Stirling Moss al volante.
Actualmente, el monoplaza pertenece a Michelle Hambly-Grobler, que se enamoró del mundo del motor desde muy pequeña. Su abuelo dirigía un concesionario, su padre trabajó en un taller y su tío competía en algunas carreras, por lo que se puede decir que la lleva la gasolina en la sangre.
Galería: Porsche 718 RS 61 Spyder de Michelle Hambly-Grobler
También entabló amistad con el piloto alemán de Fórmula 1, Jochen Mass, que fue toda una inspiración para ella. Hace dos décadas comenzó a coleccionar coches, sobre todo vehículos V8 estadounidenses, como el Mustang Fastback del 68 o el Corvette de 1958, pero un conocido le prestó un Porsche 911 Carrera RS y así fue como se introdujo en el mundo de la marca de Zuffenhausen.
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El Porsche 718 RS 61 Spyder en cuestión fue construido en 1959, y se encuentra en el garaje de Michelle, en el barrio de Woodstock, en Ciudad del Cabo. Hambly-Grobler lo compró y reparó, pero aún está en busca de una pieza fundamental, el motor original Carrera tipo 547, con una cilindrada de 1.587 cm3.
La colección de Michelle se compone de 20 piezas de Porsche en la planta baja de una antigua fábrica textil, convertida en una galería de arte. Entre los vehículos exhibidos se encuentran un tractor Diesel Junior de 1958, un Speedster verde Fiordo del mismo año, diversos 911 con los apellidos S, T, E o SC, así como dos 911 Targa, un 911 GT3 RS, un Cayman GT4, dos 911 Turbo de la Serie G y un 928 S.
Esto le sirvió a Michelle Hambly-Grobler para ser elegida como 'Personalidad Internacional de Porsche' en el año 2015. No obstante, aún sigue con su misión para conseguir el motor del monoplaza de Fórmula 1.
El 718 RS 61 Spyder tiene una historia tan curiosa como la de su propietaria. Fue fabricado por Bill Jennings, un sudafricano que deseaba que se pareciera técnicamente al mismo modelo que pilotaba Stirling Moss en las competiciones de resistencia. Para ello, escribió a Porsche para que le suministrara un motor original, una caja de cambios, una suspensión trasera y las ruedas.
Su prestigio como ingeniero surtió efecto y la firma germana le proporcionó piezas del propio 718 de Stirling Moss, usadas, pero en buen estado. Años después, Jennings se hizo granjero y el coche original de aluminio desapareció bajo una capa de pintura roja. Además, se sustituyó su motor, primero por un Volvo, y poco después por un Alfa Romeo.
Michelle, orgullosa con su adquisición, enseña las fotografías de Jennings con Moss en Kyalami durante el Gran Premio de Sudáfrica. La coleccionista ha logrado reunir casi todos los documentos que certifican el monoplaza germano con motor Carrera y las piezas que usó Moss. Una vez que se haga con el motor, su mayor deseo es poder acudir al Festival of Speed de Goodwood y pilotar el vehículo ya completamente restaurado.
