Si juntamos uno de los coches eléctricos más capaces y vendidos en el mundo, como es el Tesla Model 3 Performance, con el Toyota Supra, puede que no tengas ninguna duda de cuál de los dos llegará a meta antes en una carrera de aceleración. Incluso aunque este modelo de Tesla no ofrezca el modo 'Ludicrous' de su hermano mayor, el Model S, que garantiza un empuje similiar al de algunos superdeportivos con motor térmico.

Eso sí, la cosa cambia en el momento en que nos hemos enterado de que el japonés ha sido modificado, elevando la potencia de la mecánica hasta los 500 CV.

El coche 100% eléctrico que sale en el vídeo se mantiene tal y como llegó de fábrica, sin trucos ni retoques. Hablamos de una berlina de cuatro puertas con un rendimiento excepcional, pero con un cliente potencial muy distinto al que puede tener el deportivo de Toyota.

Dicho sea de paso, este último puede ser uno de los modelos más modificados de la historia del automóvil, con permiso de otros tantos que pasan por las manos de preparadores especializados en la materia.

El Tesla Model 3 Performance cuenta con un sistema de propulsión 'cero emisiones', compuesto por dos motores eléctricos, uno en cada eje, que ofrecen un rendimiento conjunto de 480 CV y 640 Nm de par máximo.

Con este esquema mecánico, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos, unas prestaciones muy altas, que incluso pueden asustar a los propietarios de algunos deportivos, e incluso superdeportivos.

Del Toyota Supra, recordarte que, de serie, monta un propulsor turboalimentado de gasolina, de seis cilindros en línea y 3,0 litros, que entrega 340 CV y 500 Nm de par motor máximo. Si recién salido de fábrica puede acelerar desde parado hasta los 100 km/h en 4,3 segundos... ¿qué será capaz de hacer tras los retoques en la centralita ECU que le permiten rendir 500 CV?

En el vídeo tienes la respuesta...