Entre las múltiples actividades que se celebraron durante las jornadas de los Motor1 Days 2019, tuvimos la ocasión de entrevistar al máximo responsable de Bugatti, Stephan Winkelmann. Un hombre con una dilatada experiencia, que ha desempeñado diferentes cargos de responsabilidad en marcas de renombre como Lamborghini, quattro GmbH y ahora como presidente de Bugatti. Estas son las respuestas a las preguntas que le formulamos.

Bugatti es una firma especializada en la creación de ediciones limitadas de automóviles, pero ¿cuál es el proceso para el desarrollo de uno de estos automóviles?

Me gustaría explicar que el Divo es un vehículo de edición limitada. Llevo en Bugatti desde principios de 2018. Al llegar, pude echar un vistazo a lo que ellos tenían planificado, pero, para mí, hay un aspecto que siempre utilizo para probar al equipo y el mercado que es hacer algo realmente extraordinario, en un corto período de tiempo. Esto es un test para probar a todo el mundo y te da una idea, en un poco tiempo, de cómo está todo fuera y dentro de la compañía.

Pensé en un automóvil mejor que el Chiron, un coche soñado por nuestros clientes, se lo pedí al equipo y, en poco tiempo, decidimos fabricar el Divo. Pero el Divo no es una edición especial de un automóvil, es un few-off, un automóvil que, a diferencia de un concept-car expuesto en un salón, está homologado para circular por carretera. Nos tomó mucho tiempo desarrollarlo. Mostramos el coche el año pasado y vamos a entregar la primera unidad el próximo año. Solo van a pasar dos años, entre la presentación y la primera entrega. Es bastante esfuerzo.

Con el Chiron, tenemos un coche increíble, en términos de rendimiento, aceleración, confort, pero también queremos un coche que sea el mejor en agilidad, en curvas, pero que muestre también diferentes formas de mostrar su rendimiento.

Esto fue apreciado, primero, por el equipo; segundo, por los clientes, ya que además ofrecimos una preventa del coche; y después, por la prensa y los aficionados en Pebble Beach… y nos aportó una idea exacta de lo que teníamos que hacer. Para mí, eso es un few-off. Una edición especial es lo que acabamos de mostrar en el salón de Ginebra con el Chiron 110 Aniversario, una edición limitada a unas 20 unidades del Chiron, para celebrar algo especial, que sirva como nexo de unión entre hoy y la mejor parte de nuestra historia. De hecho, La Bugatti Noir fue creado con esa intención, si miras su diseño es algo totalmente diferente al Atlantic, pero la historia que quieres contar con ese coche es importante para todo el mundo, especialmente para nosotros. El Atlantic fue un coche que se perdió, cuando iba en tren desde Monza hasta Bordeaux, y eso es algo malo que contar y nos obliga a hacer un mayor esfuerzo, puesto que el coche tiene que estar listo en 2021. Lo que habéis visto es un concept car, no el coche final, es algo más que un coche de batalla larga en el que todavía tenemos que trabajar para obtener diferentes puestas a punto y eso es bastante tarea para nuestros ingenieros en los próximos años."

¿Sabe usted algo sobre el Bugatti Atlantic que se perdió?

Sé que hay cuatro Atlantic, pero uno de ellos nunca se ha encontrado. De los tres que quedan hoy en día, dos están en manos estadounidenses. Uno pertenece al señor Peter Mullin y otro a Ralph Lauren. El tercero fue golpeado por un tren y hubo que hacer un laborioso trabajo de reconstrucción, pero es el menos original de los tres.

El cuarto era propiedad de Jean Bugatti, pero se perdió. No sé si alguien tendrá este coche, nunca lo encontramos, pero es una interesante historia. El señor Mullin me dijo que, si hubiera querido vender el coche, tenía una oferta de tres dígitos, en millones de dólares. Es algo increíble.

Para mí, Bugatti es mucho más que el T35, sabiendo, incluso, que el T35 fue creado bajo el criterio de la ligereza y la velocidad. Fue, al mismo tiempo, un automóvil de Fórmula 1 y un coche de calle legal, algo imposible hoy en día, pero puedes imaginar qué tipo de coche fue. Fue un coche ligero, no el más potente, pero sí el más rápido. El piloto francés, Albert Divo, consiguió ganar la mítica Targa Florio en dos ocasiones con  Bugatti, por eso utilizamos su nombre para nuestro automóvil.
Tenemos el Atlantic, pero, para mí, también el Royale es importante. Si quieres mostrar tres coches diferentes de la marca, entre los años veinte y los treinta, escogería el T35, el Royale y el Atlantic. Entre los tres muestran las diferentes almas de la marca Bugatti. Hoy, y también desde hace veinte años, el Beyron aglutina esos tres conceptos: confort, rendimiento máximo y aspecto lujoso.

¿Están ustedes planificando conseguir el récord de velocidad máxima con el Bugatti Chiron?
Tengo que admitir que para mí es un error reducir la velocidad máxima de coches como el Bugatti. Somos la única marca de supercoches o hipercoches, o como quieras llamarlo, que pone un montón de cosas en nuestros coches. Normalmente, un superdeportivo es un coche rápido y llamativo en términos de diseño, pero no suele ser confortable. Sin embargo, un coche lujoso es todo lo contrario. Tiene un bonito diseño, pero su rendimiento y prestaciones no suelen ser buenos. Sin embargo, el Chiron tiene la capacidad de combinar todo esto en un solo automóvil, además de hacerle la vida más fácil al conductor. En mi opinión, hay diferentes oportunidades y diferentes prioridades, pero batir un récor de velocidad mundial no es una de ellas.

El Grupo Volkswagen está invirtiendo mucho dinero en vehículos eléctricos y podría aportar muchos conocimientos a Bugatti, pero ¿ve Bugatti un futuro eléctrico o el motor de 16 cilindros en W está muy arraigado?

El motor W16 es la única propuesta del Chiron y no tiene competidor en el mundo del automóvil. Es un posicionamiento que no queremos perder, algo que sigue vendiéndose y es muy fuerte. Por supuesto, habrá un día en el que las cosas cambiarán, pero creo que en Bugatti podemos hacer mucho mejor que conseguir que un coche vaya de un punto a otro. La marca está preparada para hacer cosas diferentes. Si hablamos de vehículos eléctricos o híbridos enchufables, no es importante para Bugatti llegar antes que otros, no es la carrera que necesitamos ganar. Necesitamos estar allí cuando seamos los mejores y queremos ser los mejores sea lo que sea lo que hagamos. Estamos dispuestos a hacer más de un modelo y creo que tenemos la oportunidad para hacerlo mejor, también porque Ettore Bugatti fue lo que hizo en su tiempo. Hoy, somos una compañía muy pequeña y tenemos que ver cuáles son nuestras prioridades para conseguir algo que hoy suena imposible de conseguir, porque sustituir un coche antiguo por otro nuevo es algo todavía complicado en una compañía como la nuestra, así que imagínate añadir un modelo más a nuestra producción.
Volviendo a los automóviles eléctricos, creo que es algo que no es imposible de alcanzar para Bugatti. Para mí, si hoy tuviéramos que fabricar un segundo modelo, sería un coche utilizable a diario, muy rápido, pero no tiene que ser como el Chiron, la referencia en el mundo del automóvil. Para mí, es suficiente con ser la referencia en tu propio segmento, un coche utilizable a diario, para ir desde el punto A al B sin ninguna dificultad. Podría ser, por supuesto, un coche totalmente eléctrico, pero tiene que ser el mejor coche de este tipo. No tienes que llegar el primero, sino ser el que llegue en mejores condiciones.

Ya que estamos hablando del futuro, ¿podría fabricar Bugatti una berlina o un SUV?
Cuando hablamos de un segundo modelo, siempre se habla de cuál podría ser la forma de su carrocería. No creo que las berlinas puedan volver a estar de moda, así que, para mí, lo importante es que sea un modelo prometedor para Bugatti y que no haya algo igual en el mercado. 

¿Está usted feliz con las ventas del Chiron?
Sí, muy feliz, pero no es lo más importante para nosotros, teniendo en cuenta que solo tenemos 500 unidades para vender. Cuando compras un Bugatti, especialmente un Chiron, tiene que ser “el non plus ultra” de la colección de coches que tengas, porque estoy seguro al 100 por cien de que no será el único coche de tu propiedad. Seguramente, el propietario de un Chiron tendrá una colección de treinta o cuarenta coches y cuando compra un Bugatti tiene que ser el mejor, eso es lo que queremos conseguir y mantener, es lo que hemos hablado desde el primer momento. Tenemos que mantener el producto fresco y deseable, es mucho más importante que vender un coche.

¿Puede contarnos algo más sobre el tipo de cliente de Bugatti?
Normalmente, cuando hablamos de los clientes de Bugatti suelen ser CEO o personas muy importantes dentro de una compañía. Tenemos clientes muy jóvenes, próximos a la treintena, hasta cualquier edad. Estamos consiguiendo clientes más jóvenes de lo que yo esperaba, porque son coches muy caros. En algunos mercados es más fácil comprar un coche como un Bugatti. En los Estados Unidos es más fácil que al oeste de Europa y en el oeste de Europa es más fácil que en algunos mercados de Asia.

¿Puede contarnos el secreto de quién ha comprado el Bugatti La Voiture Noire?
No. No puedo contárselo, pero sí puedo contarle que no fue Cristiano Ronaldo.

En su opinión, ¿cuál será el futuro de la automoción?
Creo que hoy hemos hablado mucho del futuro, creyendo que el futuro comienza mañana. Pienso que hay tres tendencias principales: coches eléctricos, conducción autónoma y digitalización o conectividad. Creo que la conectividad es algo que se está desarrollando y todavía es algo complicado para la industria del automóvil encontrar la forma de proteger al cliente contra robos o evitar que sus datos personales sean compartidos, simplemente porque tiene un teléfono móvil. Este es, en mi opinión, nuestro desafío, pero también lo es estar muy cerca de nuestros clientes sin darles la impresión de que estamos violando su privacidad. También tiene que ser rentable, no olvidemos que la industria todo lo que hacer es crear valor, no solo para el cliente, sino también para nosotros. Esto es algo importante para Bugatti, pero no tanto como para marcas Premium que venden coches en los que te sientas y vas a trabajar.

La conducción autónoma ha sido tendencia en los últimos meses, dando la impresión de que será algo que sucederá en la próxima década, pero no es el caso y será difícil. La infraestructura no va a crecer tanto como desearían los propietarios de automóviles, debemos regular muchos aspectos y hay que resolver muchas cosas, pero no veo que suceda en poco tiempo.

Para el coche eléctrico, creo que debemos centrarnos en un tipo de motores alternativos para sustituir los motores de combustión y creo que lo correcto es hacerlo en propulsores eléctricos. Está claro que el objetivo principal es reducir las emisiones de CO2 y también es importante no solo de dónde procede la energía para fabricar el coche, sino cuántos kilómetros recorres al año. Por ejemplo, hoy en día, en la construcción de un coche eléctrico se emite más CO2 que en la construcción de un coche con motor de combustión, así que tienes que recorrer más kilómetros al año, para conseguir compensar la diferencia de emisiones si lo comparamos con la fabricación de un coche convencional.

Teniendo en cuenta al Chiron, entre el número de coches que producimos, con el kilometraje medio recorrido por nuestros clientes, que está cerca de unos 2.000 kilómetros al año, no tiene sentido fabricar coches eléctricos. Si todas las plantas fueran verdes, sería una historia diferente. Para Bugatti la electricidad está bien, pero con la tecnología que tenemos hoy y la forma de conseguir energía que usamos, necesitamos algo más importante que fabricar un coche eléctrico con autonomía suficiente.

Actualmente, la conducción autónoma no es importante para Bugatti. Teniendo en cuenta, incluso, que en el pasado produjimos coches más seguros, podría ser una prueba previa para grandes firmas automovilísticas que quieran atraer clientes Premium, procedentes de marcas como Bugatti u otras marcas. La digitalización, para mí, va de la mano de la conducción autónoma. Nosotros tenemos la suerte de pertenecer al Grupo Volkswagen y podemos beneficiarnos de la inversión  que están haciendo a gran escala.